Rechaud (¿?). Marca: Frion. Francia. Finales del S. XIX o principios del XX.

Obra de excepción. Su tapa rebatible, con calados de distintos diseños, muestra al centro un retrato de busto femenino. El cuerpo del recipiente, de gran calidad, con una banda central decorada con motivos fitomorfos y pequeñas volutas con formas de rocalla,; posee cuatro patas fundidas y cinceladas. Lleva asas fundidas, con mascarones, y al centro, una madera torneada. En la superficie externa de su base, sendos punzones: “Frion” y el emblema de la casa, una marmita con llama, alusivos al calor y al servicio de mesa. Una obra especial de esta firma, realizada en plata. Ex colección Elisa Peña.

Medidas. Alto máximo del recipiente: 28 cm. Largo: cm. Peso: 1288 gr. 

De refinados gustos en su vida diaria, Elisa Peña, eximia coleccionista, recibía en su hogar porteño a lo más selecto de la alta sociedad argentina. Sin duda, adquirió este rechaud o brasero de mesa -también dejamos abierta la posibilidad de que se trate de un elegante sahumador-, destinado a mantener caliente la comida, complemento del servicio, seguramente protagonizado por platos de sitio y el resto del menaje de plata antigua hispanoamericana.

Junto a su hermano, Elisa heredó la pasión de coleccionar que les había inculcado su padre, de nombre Enrique. Los Peña lograron reunir una maravillosa colección de platería e imaginería virreinal y criolla, y biblioteca. La obra cumbre de aquella colección fue el primer libro impreso en nuestro territorio, del jesuita Juan Eusebio Nierember, “De la Diferencia entre lo Temporal y Eterno”, editado en 1705 en las misiones jesuíticas; lo donó entre otros muchos títulos, al Museo Enrique Udaondo de la ciudad de Luján. Algunas de sus obras fueron llevadas a remate en la década de 1990 y nosotros tenemos el privilegio de ofrecer la presente, una pieza de alta escuela. 

Frion fue una pequeña casa francesa activa desde 1880 y hasta las primeras décadas del siglo veinte, la que poseía un atractivo catálogo. En general los distintos artículos se elaboraban en metal, a excepción de los encargos especiales que se podían hacer en plata, como sucede en este ejemplar.